sábado, 1 de noviembre de 2014

Galería

Fénix

Olas

Dulce pensamiento


Galería: Para evaluación

Alba, Serengueti. M.J.R. 2014.
Monotipo. 34.65cm x 25.5cm

Those who are gone walk with us as we go on. M.J.R. 2014.
Monotipo intervenido con pluma. 20.6cm x 45.15cm

Fénix. M.J.R. 2014.
Grabado en linóleo sobre leyer, a una tinta. 20cm x 30cm
1/2
Fénix. M.J.R. 2014
Grabado en linóleo sobre papel revolución, a dos tintas. 20cm x 30cm
1/3

Nace, libre. M.J.R. 2014
Stencil con acrílico, marcador de acetato y diamantina. 50cm x 65cm



Proyecto:
Fénix. M.J.R. 2014
Grabado en linóleo sobre tela, serigrafía y tinta china.
20cm x 30cm.

viernes, 10 de octubre de 2014

Frans Mesereel

  Frans Mesereel (Bélgica, 1889- Francia, 1972), fue un artista gráfico de origen flamenco que  se destacó por su trabajo en xilografía.

  Comenzó discípulo de Jean Delvin en la École des Beaux-Arts, y más tarde realizó sus primeras trabajos en xilografía y aguafuerte, inspirado en sus viajes a Inglaterra y Alemania en 1909.

Buey cerca de fuente, Jean Delvin.

  Trabajando como  artista gráfico para revistas y periódicos en Suiza, adquirió fama internacional gracias a su obra expresionista en que criticaba a la sociedad; entre estos trabajos se encontraba 25 Imágenes de la pasión de un hombre, la primera novela de imágenes (sin palabras) de la historia así como su secuela, Mon livre d'heures ("Mi libro de horas"), que es considerada su mayor obra, entre otras (El sol, La idea, Historia sin palabras, etc.). En esa misma época ilustró escritos de Émile Zola, Thomas Mann, y Stefan Zweig.

Portada de 25 imágenes de la pasión de un hombre, por F. Masereel.

Ilustración de Mi libro de horas, por F. Masereel.

  Durante su vida lo caracterizó una posición antifacista, declarándose a favor de la Unión Soviética. Entre 1916 y 1919 colaboró con el anarquista Claude le Maguet en la revista pacifista Les tablettes. Posteriormente, en la década de 1920, su obra sería proscrita por el régimen nazi.


 A lo largo de su vida ilustró obras de Victo Hugo, Walt Whitman, Erasmo de Rotterdam, León Tolstoi, Rabindranath Tagore, Oscar Wilde, además de los ya mencionados. Sus trabajos tuvieron una fuerte influencia en otros artistas como Lynd Ward, Clifford Harper, y varios integrantes de el Taller de Gráfica Popular, en México.
Ilustración de L'histoire a pour egout des temps de Victor Hugo, por Masereel.

  En Bélgica existe una escuela de gráfica llamada Frans Masereel Centrum for Graphix en su honor.




sábado, 27 de septiembre de 2014

Alfredo Zalce

  Alfredo  Zalce Torres fue un artista plástico mexicano, (de los más relevantes del arte moderno), miembro fundador de la LEAR, integrante del Taller de Gráfica Popular,  ganador, entre otros premios, del Premio Nacional de Ciencias y Artes (2001), y considerado pilar del muralismo mexicano. Es recordado como un hombre interesado por todo, comprometido con el arte y la sociedad, y sin pretensiones de fama ni dinero.

  Nacido en Pátzcuaro, Michoacán en 1908, comenzó a dibujar siendo muy niño para más tarde estudiar en la Escuela Nacional de Artes Plásticas entre 1924 y 1927. También fue discípulo de Diego Rivera, Guillermo Ruiz y Emilio Amero y a su vez fundó la Escuela de Pintura y Escultura en Taxco, Guerrero en 1930; durante esa década realizaría una gran labor docente en primarias y misiones culturales.

  Este artista michoacano, quien desarrollara las disciplinas del muralismo, grabado en madera, serigrafía, ilustración, escultura y relieve, se enfocó en retratar paisajes y escenas de la historia de México, dejando múltiples obras ubicadas principalmente en su estado natal, de las cuales destacan varios murales en Morelia: Gente y paisaje de Michocán, La importancia de Hidalgo en la Independencia, (ambos ubicados en el Palacio de Gobierno de Michoacán), etc.






Con noventaicinco  años cumplidos, muere de un ataque cardíaco en Morelia, en enero de 2003.



Este grabado representa a un indígena muriendo de hambre en el campo, mientras las festividades del Centenario de la Independencia pretenden homenajear a los pueblos indígenas ante los extranjeros.

Porfirio Díaz, camino a su exilio en Europa.

Grabado que representa una escuela rural.

Imagen del la campaña de alfabetización Quitemos la venda, del presidente Manuel Ávila Camacho.


sábado, 6 de septiembre de 2014

Leopoldo Méndez



  Leopoldo Méndez fue un artífice mexicano, considerado uno de los artistas gráficos más importantes de la historia del país, y el más importante en el siglo XX.

  Criado durante la Revolución Mexicana y habiendo recibido clases de múltiples artistas, dedicó su vida al arte y al activismo de Izquierda.

  En su juventud, junto a Manuel Maples Arce, Germán Cueto, Arqueles Vela, Fermín Revueltas, Ramon Alva del Canal y Germán List Arzubide, entre otros artistas, formó el movimiento interdisciplinario conocido como Estridentismo, colaborando con la revista El irradiador y las publicaciones Horizontes y Norte. Para 1930 ya habría publicado sus primeros carteles de temática política y participado en el rotativo 30-30, las revistas Ruta de Veracruz, Zig-zag, El Sembrador (órgano del Partido Nacional Revolucionario), y El maestro Rural (material de apoyo didáctico para campesinos).
Portada de la revista 30-30 Órgano de los pintores de México. Grabado en madera por Francisco Díaz de León

Portada de la revista El Sembrador. Grabado madera de hilo, por Leopoldo Méndez.

Portada de El Maestro Rural, por Leopoldo Méndez.




  En 1930 expuso sus trabajos en California y durante esa década, tras haber regresado a México, fue nombrado Jefe de la sección de Dibujo del Departamento de Bellas Artes, se unió al Partido Comunista Mexicano fundó Lucha Intelectual Proletaria (al lado de David Alfaro Siqueiros [1896-1974], Pablo O'Higgins [1904-1986] y Juan de la Cabada [1899-1986]), participó en la creación de la Liga de Escritores y Artistas Revolcuionarios (LEAR), para cuatro años después (1937), decepcionado con esta última asociación, fundar el Taller de Gráfica Popular con Alfredo Zalce y Pablo O'Higgins, entre otros artistas. 


Tierra y libertad. Leopoldo Méndez (1934)

Cartel realizado en el Taller de Gráfica Popular por Leopoldo Méndez.



  En 1946 fue galardonado con el primer Premio Nacional de Grabado y su trabajo como ilustrador fue reconocido en la Feria del Libro de la Ciudad de México. En 1952 recibiría el Premio Iternacional de la Paz.

  A partir de la década de 1940, habiéndose devaluado el arte político, comenzó a trabajar para producciones cinematográficas como Río Escondido (1947), Un día en la vida (1949), La Rosa Blanca (959), entre otros. 
Tengo sed, placa No.3 Río Escondido, por Leopoldo Méndez.

  En 1960, se publicaron grabados suyos en el álbum "450 años de lucha. Homenaje al pueblo mexicano". En 1962, el Museo Nacional de Arte Moderno exhibió una muestra retrospectiva de su obra, y en agosto de ese año, sus amigos y el INBA le rindieron homenaje en la sala Manuel M. Ponce.


  En 1969, muere víctima de hepatitis tras haber preparado su quinta colaboración para el Fondo Editorial de la Plástica Lo eterno y lo efímero del arte popular mexicano.







sábado, 23 de agosto de 2014

浮世絵

UKIYO-E


   浮世絵, es decir, Imágenes del mundo flotante, es un género de grabado que se desarrolló en Japón entre los siglos XVII y XIX, y utiliza la técnica de la Xilografía. Los temas favoritos representaban mujeres hermosas, luchadores de sumo, paisajes y (a pesar de que esos grabados estaban prohibidos), escenas eróticas.

  La expresión proviene de un sector social nacido en el actual Tokyo, que desarrolló una cultura hedonista cuyo estilo de vida era considerado como un mundo flotante.

  Sin duda, el hecho de que, producido masivamente era de fácil adquisición para todos en una época en que sólo los estratos más pudientes de la sociedad podían costear una obra de arte— que hasta entonces eran piezas únicas—,  fue un factor que determinaría la popularidad de este género artístico.


 Originalmente, este género se hizo famoso en la década de 1670, con los grabados monocromáticos de Hishikawa Moronobu, artista que, si bien no inició este género, sí lo consolidó al desarrollar los trabajos incipientes y rudimentarios de los fundadores. 






  Casi un siglo después, Suzuki Harunobu popularizaría el grabado con múltiples colores, utilizando la técnica Nishiki-e (imagen brocada).

Observando el juego,1766.


  Sin embargo, y pese a que en esa época el gobierno pretendía controlar los grabados desde sus primeros bocetos, proscribiendo aquellos que no portaran el sello de censura,  fue a finales del siglo XVIII cuando alcanzó su mayor auge gracias a artistas como Torii Kiyonaga (pseudónimo tomado por Sekiguchi Shinsuke en honor a su mentor, Torii Kiyomitsu), Kitagawa Utamaro, y un artista fugaz que sería conocido como Toshusai Sharaku (quien se caracterizó por dibujar detalles poco halagadores en sus personajes, a diferencia de sus contemporáneos, que  representaban una belleza idealizada).


trabajo de Toshusai Sharaku


Después de que el género sufriera un descenso, tuvo un último florecimiento a mediados del siglo XIX, cuando nuevas reformas que suprimían las manifestaciones externas de lujo (incluyendo los retratos de personas económicamente privilegiadas), obligaron a los artistas a enfocarse en estampados de paisajes, animales y vegetación, caracterizándose los primeros por su orientación hacia la imaginación, composición y atmósfera que a estricta observación de la naturaleza. De este movimiento surgió una de las imágenes más típicas del arte japonés: La gran ola de Kanagawa.





  A finales del siglo XIX el Ukiyo-e finalmente decayó con la occidentalización del país y esta técnica de grabado comenzó a enfocarse en el periodismo.

viernes, 15 de agosto de 2014

El grabado de Goya

  Francisco de Goya y Lucientes fue un artista español nacido en Fuendetodo en 1746 que se dedicó a satirizar la sociedad de su época y cuya obra, se dice, marcó el inicio de la pintura contemporánea. En 1780, le nombraron Académico de Mérito de la Real Academia de las Bellas Artes de San Fernando de Madrid, donde cinco años después desempeñaría como Subdirector de Pintura, sólo para convertirse en Pintor del Rey al año siguiente. En 1790, la Real Sociedad Económica Aragonesa de Amigos lo nombró socio de mérito y cinco años más tarde ganó la plaza de Director de Pintura en la Academia de San Fernando (puesto que dejaría e 1797). Más tarde se dedicaría a ilustrar la Guerra de Independencia de México de España.  Eventualmente su salud se fue deteriorando hasta que falleció de un tumor en el peritoneo y fue sepultado en el cementerio de la Chatreuse.


  Esta semana fui a visitar la exposición de arte Francisco de Goya:  Los caprichos y disparates, en el Centro Cultural Clavijero, una colección de grabados que incluía sus series Caprichos y Disparates.

  La primera, presentada en 1799, consta de ochenta grabados en aguafuerte, aguatinta y punta seca que con criaturas deformadas y extravagantes, critica las costumbres y vicios de su época. 

  Personalmente, aunque creo apreciar el trabajo y la técnica utilizada, y me fascina su censura, su obra no me resulta especialmente atractiva en cuestión de estética, pero encontré los siguientes grabados particularmente interesantes:

Nadie se conoce. Trata de cómo todas las personas ocultan su verdadera naturaleza.

 Tú que no puedes. Representa que los seres verdaderamente humanos que integran la sociedad son los que cargan el peso de los burros que la controlan.


 Devota profesión. Aquí difieren los documentos, habiendo los que señalan que representa la unión de una novicia a  la orden de brujas brujas, y los que dicen que representa a un par de seres mezquinos alcanzando grandeza al aferrarse a los textos sagrados.

  

   La segunda, también conocida como Los Proverbios, creada alrededor de 1815 y 1824 y probablemente dejada incompleta, consta solamente de veinticinco estampas realizadas en aguatinta, aguafuerte, punta seca y bruñidor.

    


  






He aquí un equeño video de Goya realizando un grabado en aguafuerete:


sábado, 9 de agosto de 2014




   
Ilustración de Sidney Paget para la Strand Magazine, presetando a los icónicos personajesSherlock Holmes (derecha) y el Dr. J.H. Watson, de Sir Arthur Connan Doyle.

Por qué Arte y Diseño


  Decidí que quería ser artista para poder materializar las imágenes que me vienen a la mente. Algo que me encanta de estar aquí y me motiva para venir todos los días es que no siento que esté haciendo mucho trabajo; sí trabajamos, pero como disfruto mucho lo que estoy haciendo, no me molesta trabajar en eso tanto tiempo.